Un hombre sencillo, blandía un arma de paz. La hacía
hablar un lenguaje de bellos sonidos. Hombre
de raíces añejas y largas alas. Profeta moderno, cantaba simples verdades, aprendidas
en su vida por las calles. En el laberinto su voz se escuchó, constante, como
lluvia en el mes de agosto, hasta que un septiembre, en sus entrañas lo
enterró. Sibarita pero humilde, amante de las tradiciones, existencia
cotidiana, reflejada en sus canciones. Por naturaleza bohemio, seducía a la
noche con su voz áspera y sus versos de virtuoso ingenio. Ágiles las palabras,
saltaban de su boca, sabiduría y humor popular, trasciende los años su discurso
de juglar. Protagonista en el proscenio del fin de milenio, compartió sin
recelo lo más selecto de su intelecto. Una mañana, La Tierra se desperezo
abruptamente, sepultó sin ceremonias edificios y gente, tal vez Rodrigo aún dormía
plácidamente o trovando daba la bienvenida al amanecer, pero indefenso, como
muchos, falleció y por un instante supo lo que es estar al revés. Se fue a
lazar quimeras con notas de guitarra, allá donde la eternidad libera y a la vez
amarra.
8 comentarios:
Hola Pherro:
Seguramente Rockdrigo amaba la música, que permitía que su alma se expresara.
Ese terremoto fue tremendo, fallecieron muchas personas cuando se produjo.
Me gustó la canción, "el huapanguero llega alegrando a todos con su rito".
Tu post es un hermoso homenaje para ese juglar!
Besos
Maribe
Veinteseis años pesan, cuentan. El recuerdo de lo ido me queda demasiado cerca. Es un tiempo en que se han regado también vidas, desilusiones y mil mareas, y en el que, fijate nada más, regresó a mi memoria una versión de este Huapanguero en la maravillosa voz de Amparo Ochoa.
Aqui estamos. Aqui seguimos. Felicidades por la entrada, por la oportunidad, y por algo de esa esencia del rock en español (lo que eso ha significado en los tiempos recientes) perdida, es cierto, en un vértigo que convirtió en escombros algunos sueños.
Verdadera leyenda urbana, el buen Rockdrigo. No sólo la amaba, le hacía el amor en cada canción, con suma inteligencia.
Humilde homenaje, gracias por compartirlo, Maribe.
El recuerdo es tan cercano a la presencia, más en el caso de gente como Rockdrigo, que de alguna manera continúan entre nosotros. Lo bueno de los sueños es que renacen de cualquier escombro, mi buen Fritzio. Seguimos.
Salu-dos, cuídense, que estén muy bien; luego nos leemos.
Que lindas palabras, si pudiera leerlas se convertiría en aire de puro gusto.
Yo no le conocía, gracias por dármelo a conocer Pherro!!
Besos
Cuando uno es fans de un estilo de cantar, o un artista en especial, le rinde un estupendo homenaje como has hecho tu con Rockdrigo, Pherro.
ABRAZOS.
Me alegra que te haya gustado, Rosa y más me alegra leerte aquí.
El mejor homenaje es no dejar morir su obra, ni su recuerdo, Antony.
Salu-dos, gracias por sus plabras; cuídense, luego nos leemos.
Bueno, le van a hacer su estatua, ya lo iré a visitar. Y mientras a seguir disfrutando su música.
Sí.
Por supuesto lo mejor siempre será la música.
Y chance alguna vez tengamos chance de oirlo y verlo tocar en las puertas de... algún lugar.
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