viernes, 11 de junio de 2010

Madrugada fría,
opaca alborada,
tibio mediodía,
tarde nublada.
De noche
la tormenta
cae inesperada;
vientos iracundos,
paz devastada,
el llanto
me cala;
intento impedirla,
fe desesperada,
horas de insomnio,
en ella naufragan.
Otra mañana,
el sol
se retracta,
cuando asoma,
de bruces
me halla.

10 comentarios:

Champy dijo...

Que día....

Porque de bruces?

2046

Pherro dijo...

Para olvidar. Dándole la espalda a la luz, negándome, mi buen amigo Hongo Dicharachero.
Cuídate, nos seguimos leyendo.

María Beatriz dijo...

Tantas emociones contrastadas en la metáfora de un día agotador...El olvido llegará en su momento , tal vez cuando sea aceptada la luz de un nuevo amanecer..

Saludos!
Maribe

Ivanius dijo...

Así ocurre, pero pasa. Y lo mejor es que se puede hacer catarsis con palabras.

la MaLquEridA dijo...

¿Estás derrotado?...

Bruja Bonita* dijo...

Querido Pherro:

Que dia para ti... Pero, pero, pero, tu sigues aqui, asi que, eso debes tenerlo bien presente.

Besos Brujos*

Anónimo dijo...

Se feliz, comienza por sonreir...es mas dificil de lo que parece, pero paso dado es paso avanzado.....tengo un pajarito!! Selenhe

D. dijo...

Hola amigo Pherro:

Hay días que uno quisiera no salir.
Noches que quisiera no volver.

Algo nos hace salir.
Algo nos hace volver.

Como un sueño recurrente, pero despiertos.

Hecate dijo...

Viajar es partir....y el principio del volver.
Un abrazo.

Unknown dijo...

Quizá esa sea la cuestión, querida Maribe, aprender a aceptar.

¿Y cuándo vuelve a ocurrir, Ivanius, de qué sirven las palabras?

¡¡NO!!, Querida La Mal, bueno, eso espero.

Trataré de recordarlo, Hechicera Sexy, cuando viva otro día igual.

Sigo intentándolo, Selenhe; alguna vez partir será el fin.

¿Acaso la rutina, la responsabilidad, Amigo Narrador? Tal vez nunca lo sabremos, pero seguiremos.

Abrazo a todos, cuídense mucho, luego nos leemos.